Parece que el mercado de fichajes comienza a despertarse. Los intereses y movimientos superficiales empiezan a transformarse en ofertas y negociaciones. Los lentos pasos que se están dando en esta ventana de transferencia coinciden exactamente con el vaticinio que Antonio Cordón hizo de la misma. Y, de momento, esta dificultad para cerrar operaciones se está viendo en el Betis, sobre todo en cuanto a salidas. La directiva verdiblanca cerró a los «Luizes» con el suficiente tiempo de antelación, propio de la política del club para evitar intromisiones de otros equipos. También es cierto que aún estamos en julio, quedando un mes de agosto que se antoja frenético y bastante más convulso.
A nadie le pilla por sorpresa la situación financiera del Betis. Los verdiblancos necesitan cuadrar cuentas y, para ello, se manejan varias alternativas. Una de ellas es activar las posibles palancas que anunció Ángel Haro, en busca de formar «el equipo más competitivo posible». Estas herramientas vendrían a ser inyecciones de capital mediante patrocinios y, sobre todo, fruto del Big Data. La recuperación del área de retail (que ha permitido la autonomía de gestión de las dos nuevas tiendas inauguradas en Sevilla), los fondos CVC destinados a impulsar el ticketing o la potenciación del análisis de datos son prueba de ello. Sumemos también los casi 20 millones de euros obtenidos de la campaña de abonos.
La adopción de las famosas palancas financieras no soluciona todos los problemas a los que se enfrentan desde la zona noble del Benito Villamarín. El primero de ellos es el sobrepasado límite salarial que LaLiga exige cuadrar. Hay voces que dicen que el organismo presidido por Tebas suavizará las normas de manera temporal, pero hasta el día de hoy no hay ninguna confirmación. Entonces, el Betis se abre a escuchar toda oferta que llegue por cualquier jugador. Nadie es intransferible. Y parece que ya empiezan a sucederse.
Entre los nombres con los que Pellegrini no cuenta para confeccionar la plantilla, parece que hay dos cuyas salidas parecen inminentes. Se tratan de Loren Morón y Diego Lainez, quienes no viajaron a Eindhoven el pasado sábado. En el caso del delantero marbellí, el equipo que más suena para hacerse con sus servicios es el Granada. Sin embargo, Loren cuenta con otras propuestas para jugar tanto en Segunda como en Primera, categoría en la que busca permanecer. El montante del traspaso obtenido por el «9» significaría un 100% de plusvalía para las arcas béticas, fundamental para aumentar el límite salarial.
La estrategia del Betis en cuanto a Lainez pasa por renovar su contrato, que expira en 2024, y cederle a un Primera. Tampoco se descartaría un traspaso que haga recuperar parte de la inversión por el joven extremo. Diego quiere estudiar todas sus opciones antes de tomar una decisión. De hecho, aún no ha respondido a la oferta de ampliar su contrato. Celta y Almería son algunos de los equipos que se han interesado por la situación del jugador. También se tanteó su nombre desde el extranjero, sobre todo Francia y Alemania. Su vuelta al continente americano parece que se descarta desde el entorno del propio jugador.
Ciertos rumores apuntan a una posible marcha de Víctor Ruíz. El central, con contrato hasta 2023, parece que cuenta con varios pretendientes en Primera. La llegada de Luiz Felipe podría propiciar la marcha del catalán. Uno de ellos es el Espanyol, conjunto que estaría encantado con volver a contar con sus servicios tras su salida en 2011. Sin embargo, aún no existe ofertas ni reuniones entre clubes. Se trata de un tanteo en fase inicial, cuya maduración se dará en las próximas semanas.
Otro central catalán que podría salir es Marc Bartra. El club estaría encantado con su permanencia los próximos años, e incluso cuenta con una oferta para ampliar su contrato, que finaliza en junio de 2023. Pero la delicada economía bética obligó a lanzar una propuesta a la baja, insuficiente para el ex del Barcelona. Las negociaciones no están rotas, de hecho el jugador está feliz tanto en el club como en la ciudad. No obstante, de no darse un acuerdo ambas partes podrían plantearse la salida de uno de los sueldos más altos del plantel. El gran rendimiento de Bartra esta temporada podría despertar el interés de varios equipos. Se espera que tanto Bartra como directiva se reúnan próximamente para aclarar las pretensiones de ambos y buscar una solución.
Siguiendo con el bloque de jugadores que terminan contrato en 2023, encontramos el caso de William Carvalho. Parece que la salida del luso se antoja crucial para que lleguen fichajes. Su alto salario y el escaso porcentaje por amortizar de su fichaje son factores que gustan a los verdiblancos para buscar un traspaso y apuntarse otra plusvalía. De hecho, Carvalho cuenta con la posibilidad de entrar en la «Operación Aouar», siendo el Olympique de Lyon su nuevo destino. Sin embargo, el portugués no quiere renunciar a su sueldo y pretende jugar Europa la próxima temporada, con el Mundial en el horizonte.
Tampoco desea renovar a la baja, y podría estar esperando a finalizar su vínculo con el Betis para firmar uno de sus últimos grandes contratos. Desde el club se muestran optimistas en cuanto a la llegada de una propuesta que seduzca a William. Tras una aparente ausencia en la expedición a Inglaterra, finalmente el luso formará parte de la misma según El Desmarque. En cambio, Cordón no parte con el resto del equipo. Tampoco lo hacen Loren y Lainez. Tanto Víctor Ruíz como Camarasa permanecerán en Sevilla para continuar sus respectivas recuperaciones.
De momento, ninguna operación cuenta con la luz verde por parte del club. Tampoco ha llegado ninguna oferta fuera de mercado por los pilares del equipo… aunque sí que se ha transmitido el interés de grandes europeos en algún caso. Tras los primeros tests de pretemporada, pocos integrantes de la actual plantilla desconocen los planes de El Ingeniero para ellos. Con el comienzo de LaLiga en tres semanas, a todas las partes les gustaría tener cerradas sus respectivas hojas de ruta. La presente semana podría ser fundamental para comenzar a dar salida a determinados jugadores. Cuanto antes se cierren las ventas, antes se podrá empezar a trabajar en cerrar fichajes… y regresos.