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Comenzaba la segunda etapa de Joan Plaza como entrenador del Coosur Real Betis, visitando la pista del Morabanc Andorra, un equipo complicado que venía haciendo las cosas mejor que el equipo sevillano.
El comienzo del partido estuvo marcado con la novedad en la titularidad del canterano Magassa, antes las bajas del capitán de Pablo Almazán y la marcha de Ryan Harrow. Un primer cuarto sin ningún dominador claro, con dos equipos con bajos porcentajes de tiro, especialmente desde la línea de 6,75 que reflejaba un 16-14 en el marcador a favor de los locales.
Uno de los puntos débiles del Morabanc Andorra es la ausencia de hombres altos en el plantel, con ningún jugador que supere los 2,10 metros. Algo que aprovecharía el entrenador catalán, con la premisa clara de dominar el rebote ofensivo, clave para el transcurso del partido. El segundo cuarto seguía la misma tónica hasta los últimos tres minutos, donde una serie de despistes propios del conjunto sevillano hacían decantar el marcador a favor del Andorra (36-28).
Tras el descanso, un tercer cuarto desastroso hacía ampliar la diferencia a menos 20 puntos, marcado por las numerosas perdidas de balón, además de conceder tantas segundas oportunidades al rival. El 2/16 en triples para los sevillanos hacía indicar el mal trabajo en ataque en el día de hoy. La reacción defensiva por parte de los de Joan Plaza permitía reducir la desventaja a 13 puntos.
Las palabras del técnico catalán provocaron un buen trabajo del Coosur Real Betis en la defensa, pero el desacierto del equipo en ataque fue una losa que no pudieron levantar. La victoria se quedó en Andorra con un marcador final de 72-65 a favor de los andorranos.
Se pueden sacar cosas positivas como la confianza en Mike Torres, con una actuación aprobada, pero mejorar las carencias que sufre el conjunto sevillano en ataque serán vitales para empezar a ganar partidos de manera urgente. El Coosur Real Betis es uno de los equipos que peor tira desde 6,75.
