El Real Betis de Manuel Pellegrini se encontraba hoy con una nueva aventura europea, esta vez en Zagreb y en la nueva Conference League. El partido de ida en el Benito Villamarín y las irregulares actuaciones del equipo en sus últimos enfrentamientos planteaban numerosas dudas entre la afición sobre la posible remontada, y la estadística de que ningún equipo español había ganado en este estadio tampoco acompañaba.
En el comienzo del encuentro el conjunto verdiblanco parecía salir muy decidido a darle la vuelta a la eliminatoria con algunas llegadas al área rival, pero este ataque se fue difuminando con el paso de los minutos y fueron los croatas que, a pesar de no tener la posesión del balón, generaban cada vez más ocasiones que los béticos. En medio de este enfrentamiento por hacerse con el control del partido llegó el gol del reciente fichaje Cédric Bakambu con un grave error de la defensa del Dinamo de Zagreb y una gran definición de nuestro delantero titular en el día de hoy, lo que dejaba una ligera ventaja al descanso a favor del Betis.
Sin embargo y a pesar de llevarse esa superioridad al descanso, el conjunto verdiblanco no supo sostenerla e incluso incrementarla para ponerse por delante en la eliminatoria, sino que terminó por encajar un gol por parte del extremo japonés Takuro Kaneko tras una cadena de errores defensivos y de colocación. Tras este mazazo y con un físico y un banquillo muy limitado el Real Betis apenas tuvo ocasiones de mérito como para anotar el segundo tanto en una segunda parte muy pobre y en una consecución de fallos y falta de agresividad que en estas competiciones se pagan muy caro.
Una vez más queda claro que este Betis necesita mucho más para, al menos, hacerse un hueco en Europa y competir estas fases eliminatorias que llevan años resistiéndose con partidos como el de hoy donde, necesitando dos goles para avanzar de ronda, los de Heliópolis lanzaron únicamente dos veces entre los tres palos, terminando uno de ellos en el único tanto a favor de la tarde.