Después de una noche mágica, la vivida el pasado jueves en el Olímpico de Roma, donde el Real Betis logró la hazaña de ganar al equipo romano por uno a dos, colocándose con nueve puntos y como líder indiscutible del grupo C de la Europa League, toca volver a pensar en liga y en la visita a domicilio al José Zorrilla.
El próximo domingo 9 de octubre Pellegrini y los suyos viajarán a Pucela para enfrentarse al Real Valladolid con el objetivo de seguir enganchados a los puestos de Champions y, sobre todo, demostrar que la plantilla bética está muy capacitada para luchar de manera directa por todas las competiciones posibles.
El equipo verdiblanco está cuajando un inicio de temporada sensacional, con cinco victorias y tan solo dos derrotas en los siete partidos que ha disputado. A pesar de la derrota de la semana pasada ante el Celta en Balaídos, el Betis demuestra tener un gran nivel de juego y sobre todo goles, encadenando diez goles a favor por solo cinco en contra.
Sin embargo, el Valladolid no termina de arrancar del todo en liga, y es que en siete encuentros solo cuenta con dos victorias, sumando también un empate y cuatro derrotas. El equipo llega a la octava cita del campeonato como decimosexto en la tabla, y tan solo dos puestos por encima del descenso.
Manuel Pellegrini podrá contar con la totalidad de la plantilla, salvo con Fekir, Camarasa y Juanmi por lesión, y Luiz Felipe, por sanción. El «ingeniero» sí que podrá disponer en sus filas de dos jugadores del filial bético, Juan Cruz y Lara.
Por parte del Valladolid, Pacheta no podrá disponer de algunos de sus jugadores, como es el caso de Asenjo, Joaquín Fernández, Anuar y El Yamiq, por lesión. Luis Pérez, tras su lesión muscular, es duda para disputar el encuentro.
El encuentro promete ser disputado, y es por eso que el Real Betis necesitará aprovechar y solventar bien sus oportunidades con el objetivo de seguir soñando con disputar la Champions League el año que viene. La fiesta bética debe continuar en Valladolid.